Yoel (6): después de dos meses regresó a la titularidad para sorpresa de todos. Realizó un auténtico paradón a Guardado y en los goles poco pudo hacer ante la buena definición de los deportivistas.
Hugo Mallo (5): se las tuvo tiesas con Guardado durante todo el partido y quizás eso hizo que apareciese menos en ataque. Los problemas físicos le impidieron acabar un partido que fue correcto sin más.
Oier (6): buen encuentro del navarro cuyo lunar fue la mala colocación en los dos primeros goles. Contundente, resolutivo y con presencia ofensiva cuando actuó de lateral.
Túñez (6): expeditivo y seguro al igual que Oier, aunque sufrió con la velocidad de los atacantes del Deportivo.
Roberto Lago (5): uno de sus partidos más flojos esta temporada. Estuvo lento e impreciso con la pelota en los pies. Por su banda llegó el mayor peligro del rival.
Oubiña (5): en un partido de máxima exigencia su rendimiento se fue apagando con el paso de los minutos por el cansancio. Después de sostener al equipo en la primera mitad, se diluyó en la segunda desapareciendo sus fundamentales cambios de juego.
Álex López (7): de los pocos que rindieron a buen nivel durante todo el encuentro. Trabajó a destajo, dirigió al equipo y probó con disparos lejanos a Aranzubía. El jugador más entonado e inspirado.
De Lucas (6): rendimiento con altibajos del catalán que tuvo momentos de inspiración combinados con minutos de precipitación. Cuando menos estaba apareciendo se sacó un zurdazo que dio vida al Celta, además de lanzar con maestría la falta del segundo tanto.
Orellana (6): el jugador que creó más peligro a la defensa del Deportivo, pero al igual que De Lucas le faltó constancia en su juego. Lo intentó de todas las maneras y sus momentos de mayor brillantez aparecieron en la segunda mitad.
Joan Tomás (4): tuvo la oportunidad que tanto reclamaba en el once y la desaprovechó. No encontró su hueco entre la telaraña defensiva blanquiazul y su presencia en el juego fue testimonial.
Iago Aspas (3): se esperaba mucho del de Moaña pero su rendimiento fue más que decepcionante. Su exceso de motivación le hizo estar descentrado y acelerado. El enorme partido de Colotto también contribuyó al flojísimo partido del diez.
Bermejo (5): su presencia en el terreno de juego creó dudas a la defensa rival y le puso pundonor con cabeza a sus acciones. Le faltó más presencia en el área con peligro.
David (5): la velocidad del talaverano fue un factor desequilibrante, aunque en los metros finales no estuvo acertado.
Catalá (6): en poco tiempo anotó el gol del empate momentáneo demostrando que es el mejor jugador del equipo a balón parado. Como central estuvo a la altura.