Celta 4 - 1 Barcelona. Uno a uno
Hugo Mallo (10): una vez más desquició a Neymar, que se dedicó a provocarle sin éxito. Se crece en los partidos importantes y en ataque puso el centro del tanto de Guidetti. Nivel de selección.
Cabral (10): pese a salir a veces un poco a lo loco a los cruces dejando un hueco importante a su espalda, completó un sobresaliente encuentro. Contundente y expeditivo.
Sergi Gómez (10): si Luis Suárez casi no apareció fue gracias a su excelente marcaje. Lo convirtió en un jugador del montón. Marcó territorio desde el principio con su agresividad y lectura del juego. Ahora mismo es el mejor central de la plantilla.
Jonny (10): Apelación hizo justicia y respondió con una actuación soberbia. Da la sensación de que siempre aparecerá para arreglar cualquier desperfecto en la zaga. Puso el candado en su banda.
Augusto (10): el capitán siempre lo tuvo claro: "el esfuerzo no se negocia". Se dejó la piel en cada jugada, haciendo un desgaste descomunal en la presión. Robó, distribuyó y corrió. Una locomotora que no para de trabajar con cabeza.
Radoja (10): su titularidad fue una de las claves de la goleada. Inmenso trabajo junto a Augusto, yendo al máximo en cada balón dividido. Recuperó 13 pelotas y no se complicó en el pase. Un pulmón necesario en el centro del campo.
Wass (10): como mediapunta gozó de una libertad que le ayudó a pausar su juego y ofrecer una solución en la salida de balón. Hizo que Busquets tuviese poca importancia en el desarrollo del partido. Completamente adaptado.
Orellana (10): además de sus pinceladas de calidad, realizó un trabajo sensacional en defensa, desbaratando ataques del Barcelona en el último instante. Su sociedad con Nolito sigue dando sus frutos y supo encontrarle los puntos débiles a Mathieu.
Nolito (10): puede que ahora mismo sea el jugador español más desequilibrante del planeta. Se sacó de su repertorio de mago un tiro milimétrico para abrir el marcador. Fue una 'mosca cojonera' para Dani Alves y demostró que es un superclase.
Iago Aspas (10): el genio de Moaña se lució con dos golazos fantásticos. No le tembló el pie delante de Ter Stegen. No solo fueron los tantos: volvió loco a los centrales culés con su movilidad y presión. Por si fuera poco, robó diez pelotas.
Pablo Hernández (6): bajó la intensidad del encuentro con su fútbol lento y previsible. Veremos si vuelve a ser titular en Eibar.
Guidetti (8): por fin logró el gol que tanto buscaba y deseaba. Con el tanto deberá ganar en confianza en los próximos partidos.
Planas (-): presencia testimonial.
Berizzo (10): planteamiento perfecto. La entrada de Radoja dio la consistencia que necesitaba el equipo para ser un vendaval que arrasó al Barcelona. Su idea de juego está enamorando al fútbol español. Siempre responde en los partidos grandes.
