Eibar 0 - 1 Celta. Uno a uno

Sergio (6): no hizo ninguna parada de mérito, pero sí transmitió mucha seguridad y en ningún momento se mostró dubitativo.

Hugo Mallo (8): difícil recordar en los últimos tiempos un partido donde aportará tanta profundidad en ataque. No paró de subir y generó mucho peligro. Rozó el gol y puso buenos centros. Correcto atrás.

Cabral (5): cometió dos errores graves en la salida de balón que pudieron costar caro. En el resto de facetas cumplió, aunque casi pierde los nervios al descanso.

Fontàs (6): sin estar brillante en la salida de balón, se le vio más atento y seguro que su compañero en la zaga. No sufrió con los delanteros del Eibar.

Jonny (8): cada vez que un compañero cometía un error, aparecía él para solucionar el problema. Fue una máquina de recuperar balones y su banda fue inexpugnable.  

Augusto (7): se sacrificó en materia defensiva y apenas se dejó ver en posiciones de ataque. Labor gris, aunque fundamental para el buen funcionamiento del centro del campo. Recuperó 7 balones y acabó con un 92,3% en pases.

Krohn-Dehli (9): cuando la afición rival te aplaude al ser sustituido es evidente que acabas de dar una exhibición sobre el césped. Pases elevados o de tacón, que sirvieron para abrir huecos donde no los había. Una pena que solo lo podamos disfrutar seis jornadas más con la camiseta celeste.  

Santi Mina (5): encuentro discreto del canterano, que entró poco en juego. Sin participar demasiado, provocó el penalti que fue clave en el resultado final.

Orellana (6): rompió la tendencia de los últimos meses. Discreto como mediapunta y desequilibrante partiendo desde la derecha. Negado en el remate a puerta. 

Nolito (7): una vez más hizo mucho daño con sus diagonales y sigue inspirado en los metros finales. No falló desde la once metros y ya está a un tanto de la decena. Está en un magnífico momento de forma.

Larrivey (6): pese a no estar fino en el remate, jugó bien de espaldas con sus compañeros y realizó un destacado trabajado en la presión. 

Pablo Hernández (6): con su salida al campo, el equipo encontró un equilibrio y jugó sus mejores minutos. Se adaptó bien a la posición de mediocentro.

Radoja (-): reforzó el centro del campo para frenar el asedio rival. 

Charles (-): presencia testimonial.

Berizzo (8): dio continuidad al once del Rayo y, salvo despistes individuales, el Celta fue muy superior a su rival en todas las facetas del juego. Acertó con la entrada de Pablo Hernández y quizás pudo hacer antes los otros dos cambios. Está despejando dudas sobre su continuidad.